Friday, March 31, 2006

Miguel Tapia: "No hay posibilidades de volver con Los Prisioneros"

El ex socio musical de Jorge González habla de sus planes a poco más de un mes de la separación del grupo. Junto a Sergio "Coti" Badilla prepara una nueva agrupación.

Manuel Maira

Hace poco más de un mes Los Prisioneros cumplieron con su último concierto. Una presentación en Caracas, Venezuela, fue la que selló la segunda disolución de la banda formada en el Liceo 6 de San Miguel en 1979 (la primera fue en enero de 1992). Y para Miguel Tapia (41), baterista histórico del grupo, ese show fue sólo uno más. "No era la primera vez que nos estábamos separando. Para mí fue dejar de tocar y que Jorge partiera a hacer sus cosas. No me traumó en absoluto", dice el músico.
Esto se entiende revisando la última etapa del trío, que funcionaba desde principios de 2005 con reuniones puntuales para cumplir con esporádicas presentaciones debido a la distancia física entre la residencia de Jorge González, en México, con Tapia y el guitarrista Sergio "Coti" Badilla, los que seguían con su vida en Santiago, sin planes de mudarse. Eso, más fuertes diferencias "de personalidad" entre González y Tapia acabaron con el grupo de Tren al Sur. "Fui varias veces a México, pero opté por estar acá por razones personales. Pero esa no fue la razón de la disolución. Fueron cosas de personalidad. Jorge (González) comentó que por negocios yo no me había ido (a México), pero no es cierto, porque está claro que mi mejor negocio era trabajar con Los Prisioneros", detalla el músico de la separación del grupo y de su ex socio de años. "No hay posibilidades de volver con el grupo. Lo descarto. Ya estamos viejos", agrega.
Tapia dice que todo fue "en buena", aunque también aclara que desde el concierto en Venezuela que no tiene contacto con González. Tampoco con Narea, aunque dice que a ambos les desea éxito en sus proyectos. Con quien sí sigue en contacto permanente es con "Coti" Badilla, su ex compañero en el breve proyecto llamado Razón Humanitaria que Tapia formó en 1999 y que incluía al venezolano Argenis Brito.
"Tenemos varias canciones terminadas de ese grupo y ahora con Coti estamos retomando ese trabajo para sacarlo de aquí a fin de año", cuenta. Y para eso Tapia ya montó un estudio en su casa de Ñuñoa, donde además pretende avanzar en proyectos paralelos.
Lo más próximo y concreto para el percusionista es su participáción como músico invitado de Gonzalo Yáñez, con quien "enganché de una" en los días que el uruguayo fue invitado a tocar con Los Prisioneros en 2004. Anoche, en el pub Subterráneo, de Providencia, tocaría por primera vez junto a su amigo, y mañana lo hará en El Padrino Club, de Las Vizcachas.

Saturday, March 25, 2006

Concierto: La calle de Manu Chao

Manuel Maira

Lo había anticipado en La Pintana y en Concepción: Manu Chao, a sus 45 años, se ve y desborda energía como un quinceañero. Y anoche el músico franco-español demostró a las cerca de nueve mil personas que llegaron a la Estación Mapocho, que su show es toda una experiencia.
Su recorrido de vida apegado a las clases populares del mundo entero se hace aún más presente en directo en su particular fusión de ritmos. Apoyado en su banda Radio Bemba, Manu Chao repasó su militancia en Mano Negra (Casa Babylon, Señor Matanza) y su etapa solista (Clandestino, Desaparecido) cargado al ska y el reggae.
Aunque se echa de menos material fresco (desde 2001 que no edita un disco formal), el músico compensa esa carencia con un espectáculo que desborda naturalidad, calle y pasión. El ex Mano Negra dejó claro que vale la pena esperar seis años por verlo en vivo.